Desde las 4 de la madrugada de este jueves, varios autobuses con manifestantes provenientes de diferentes estados del país, como Morelos, Jalisco y Querétaro, llegaron a las inmediaciones del Senado de la República. Los manifestantes, en su mayoría empleados del Poder Judicial, se distribuyeron estratégicamente en los accesos al recinto legislativo.
Se colocaron sobre las banquetas de Paseo de la Reforma y alrededor de las calles adyacentes, para bloquear el Senado de la República
Se trata de una manifestación masiva contra la reciente aprobación de la Reforma Judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Esta movilización ha provocado un caos vial, afectando particularmente la circulación en las avenidas Insurgentes y Reforma, en la alcaldía Cuauhtémoc.
Algunos de los manifestantes instalaron casas de campaña, mientras que otros se situaron frente a las vallas de granaderos que permanecieron en la zona durante toda la noche. La seguridad en torno al Senado fue reforzada, con cierres a la circulación en varias calles cercanas, incluyendo Madrid y París, para contener la manifestación.
Durante la madrugada, algunos de los trabajadores judiciales mantuvieron su presencia en el área, vigilando los accesos al Senado y asegurando que ningún senador pudiera ingresar sin antes dialogar con ellos. A las 6 de la mañana, en un acto simbólico de resistencia, los manifestantes entonaron el Himno Nacional, dando inicio formal a la jornada de protesta.
¿Qué ha pasado con la Reforma?
La Reforma Judicial fue aprobada en lo general y en lo particular por la Cámara de Diputados el miércoles pasado, con el respaldo mayoritario de la coalición formada por Morena, el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM). Con esta aprobación, la minuta fue enviada al Senado para su discusión y eventual ratificación, lo que ha generado una fuerte oposición entre los trabajadores del Poder Judicial.
Por eso la manifestación ahora se ha movido al Senado.
La manifestación en el Senado es una muestra del rechazo de los trabajadores del Poder Judicial a los cambios propuestos en la reforma, los cuales consideran que afectarán su autonomía e independencia. La tensión en la zona continúa, mientras se espera que el Senado inicie la discusión de la minuta en los próximos días.